HUGO CHAVEZ LOVES U.S.

HUGO CHAVEZ LOVES U.S ……GUSTAVO CORONEL


Durante esos 28 años que estuvo Gustavo Coronel en la vieja PDVSA, llevando las riendas del vital oro negro, savia de la vida y el desarrollo de todos los venezolanos, riqueza en mano de una dirigencia apatrida y comprometida con oscuros intereses personales y dirigida a enriquecer otras fronteras, nosotros los obreros, personal de la nomina diaria, contractual y mayor asumimos y en buena hora, la de la justicia, retomar la razón de ser de la industria petrolera venezolana,
Aprovechamos la coyuntura propiciada por ustedes “Gente del petróleo”, que en una increíble y extraña actitud política aburguesada, “detuvieron” nuestra corporación, motor de la vida de todo un pueblo inocente que sufrió una actitud terca y para nada profesional.

Nosotros, los trabajadores de la industria, que nos llenamos del negro, de gas y de H2S, quedamos estupefactos, cuando de manera arbitraria se detuvo el corazón de nuestra economía y miles de personas murieron en clínicas y carreteras al acabarse la gasolina, el kerosén, el gasoil, el gas para cocinar y otra cantidad de compatriotas, perdieron sus familias además del empleo. Para aquel momento, la política no cruzaba los portones para dividirnos, pero el empeño fue de ustedes, de usted, Sr. Coronel, que en una pelea intransigente por no dar respuestas del estado financiero y el manejo estratégico de PDVSA, prefirieron mantenerla como una caja negra al servicio de pocos manos y la perdida progresiva y constante de su infraestructura y su potencial a todos los niveles, para venderla luego a precio de gallina flaca al mejor postor, al resultar operacionalmente inviable.

El presidente Chávez, no tiene ningún interés en dañar a Estados Unidos de Norteamérica, al contrario, ama al pueblo norteamericano, al igual que los ciudadanos de a pie, queremos a ese hermoso País. No sigamos mintiendo al mundo. Con el presidente Obama, se abre una ventana esperanzadora, para cerrar heridas y reforzar nuevas políticas de respeto y consideración entre hermanos, pero de igual a igual y bajo la premisa de aceptar la autodeterminación de los pueblos.

Seguiremos siendo un productor confiable del recurso que USA necesita y trabajaremos juntos en eliminar viejas retaliaciones políticas y retomar el sendero seguro que guiará a Venezuela a ganarse el sitial que le corresponde como productor mundial.

Al respecto de las nuevas relaciones de la tierra de Bolívar, con Irán, Rusia, Cuba y China, nuevos modelos se levantan y la recesión económica global obliga y estamos seguros que el nuevo presidente norteamericano entiende el papel de los líderes emergentes que buscan la mayor felicidad posible de sus pueblos.