sábado, 21 de marzo de 2015

"LOS BACHAQUEROS"

No es el bachaco culón que nombra Ali Primera en sus canciones, tampoco es el bachaco culón importado como complemento afrodisíaco para los impotentes, es una rara especie de personaje que se ha levantado de lo peor del ser humano y que apareció por primera vez entre los venezolanos en el año 2002, cuando el golpe atroz de la oligarquía nos obligaba  hacer colas para la gasolina, la bombona de gas o conseguir los productos de primera necesidad en los anaqueles de los Supermercados. Este virus mortal se propaga con más fuerza desde la hermana República de Colombia, aupado por el ex presidente Uribe en una guerra económica sin precedentes, antes contra Hugo Chávez y ahora contra el camarada Nicolás Maduro. El contrabando de gasolina y sus derivados ya no es tan atractivo como antes, e increíblemente se ha casi que sustituido por la extracción de productos de primera necesidad e higiene personal vitales para el ser humano, y que buscan llevar al venezolano de a pié a una desesperanza total y el caldo de cultivo para el odio hacia el gobierno y por ende la perdida de la gobernabilidad, y afianzar un régimen de transición solicitado por los mas acérrimos opositores de la ultraderecha nacional y sus aliados en Washington.

El venezolano común se ha alienado por falsos valores importados, desde la música que canta, no al amor, sino a la traición o al engaño al golpe de un vallenato, la televisión de capos, drogas, narcotraficantes, y por último no el triunfo del amor y la amistad, sino la supervivencia del mas fuerte y la destrucción del débil, que coinciden “casualmente” con la reciente cultura que ha emergido entre los coterráneos  que salen a diario, subidos en camiones o a pie, cargados de un kit para colas, que desaparecen en un tris el gigantesco esfuerzo gubernamental subsidiado que a duras penas calienta los anaqueles y estanterías comerciales. Pareciera risible pero no lo es, pareciera un chiste de mal gusto, pero no lo es, parece una locura ver la calle atestada de gente  y correr, como si fuera a perder el vuelo de un avión hacia una excursión soñada, todo por obtener un articulo extinto o simplemente llevar algo a la casa.

El bachaquero que conozco,  ha sacado un cuchillo en plena cola para amedrentar al vecino, se ha liado a golpes contra hombre o mujer, no importan embarazadas o ancianos, la consigna es arrasar con todo, y pobre del inocente que ose atravesarse en su negocio. ¿Hay vigilancia militar para este delincuente? Si la hay, pero a veces prefieren hacerse los locos, porque así se comporta la mayoría….lamentablemente.



CHAVEZ TENÍA RAZÓN

Mi Comandante siempre tuvo la razón, era un libro abierto, futurista, una bitácora viviente, pues claro, su brillante vida estaba inmersa entre libros de historia viva, de un pasado decodificado por las generaciones futuras, comprendida por liderazgos como el suyo, de muy pocos, pero grandes  hombres que le torcieron el brazo a esa misma historia, que imperios y amenazas pasadas pretendieron mantener bajo su dominio indefinidamente a través del tiempo.

Nos encontramos hoy aquí, en pleno siglo XXI, enfrentando  aquella misma amenaza, los Estados Unidos de Norteamérica y sus aliados. La retórica de Bolívar era subestimada, se le creía un guerrerista nato, nacido para el combate, y la historia contada por perdedores de aquellas batallas de independencia, se aseguraron de mantenerlo en un sarcófago de plomo y sacarlos de vez en cuando para que el  pueblo heredero de su lucha libertaria, le rindiera un lacónico homenaje en feriados. Hugo Chávez rasgó el manto de plomo del Libertador, y juntos retomaron las banderas del nacionalismo, despertaron al pueblo dormido, lo llevaron a la calle, a las trincheras de lucha para no volver jamás. Gracias a esa formación de estirpe libertadora, hoy nos encontramos de pie y no arrodillados ante esta nueva arremetida imperial, para decirle al amo de turno de Norteamérica…..¡Yankees  Go Home!

Existe una diferencia marcada entre esta arremetida imperial y las pasadas. En los tiempos pasados, los Estados Unidos de Norteamérica consideraban su patio trasero a Latinoamérica y como tal, nunca se interesaron por la comprensión de su gente o de su cultura, solo importaba el recurso energético que rodeaba aquellos personajes del tercer mundo. Sus líderes y políticos desestimaron desde siempre  aquellos descendientes de aborígenes, al fin y al cabo éramos una mescolanza descubierta por imperios europeos, cuyo futuro estaría marcado por un  tutelaje.

La arrogancia de Obama, confirma  la ignorancia supina de su propia historia personal, pues desciende de afrodescendientes y hoy es Presidente de la nación más poderosa del planeta, gracias  a que su propio estado natal fue conquistado y zurcido como estrella a la bandera Norteamericana. Esa misma ignorancia imperial, desinteresada por el hombre como ser humano, pero infinitamente importante como aliado en sus intereses materiales de supervivencia, comete hoy un gran error, y la equivocación más funesta que le condenaría: Amenazar a Venezuela.

A pocos días de la Cumbre de las Américas, el Sr Obama enfrenta hoy un impensable número de Países que apoyan decididamente a Venezuela y que le pedirán la derogación del infame decreto firmado en Washington, aunque para nadie es un secreto, que la desesperación del Tigre de papel, va más allá de su desconocimiento de la cosa política de nuestras integraciones recientes en el Alba, Mercosur, Unasur y otras, sino que  sus enclaves opositores en Venezuela se desintegraron por sus apetencias políticas particulares y despilfarro a granel de los dólares de sus ONG yankees, el propio Obama entonces toma las riendas de su ofensiva y arremete contra Venezuela de una manera insólita.

#Obamaderogaeldecretoya